Hace tres años comenzamos a elaborar este blog colectivo; un blog en el que nos planteamos como objetivo estar al día de las novedades surgidas en el mundo de la tecnología educativa para darles difusión y hacer uso de ellas en la práctica docente. Siendo los participantes en este proyecto profesionales de la enseñanza en Andalucía, tomamos la decisión de enmarcarlo en alguna de las modalidades de grupos de investigación educativa ofrecidas en nuestro sistema, optando por la variedad de grupo de trabajo bajo la supervisión del Centro de Profesores de Huelva - Isla Cristina. Una participación sin ningún valor lucrativo, quizá por el aprecio a esa sencilla mención a nuestro trabajo plasmada en el certificado que este centro nos otorga cada curso. Después de tres años funcionando acoplándonos a los compromisos que como grupo acordamos con esta entidad, nuestra solicitud de continuidad para el curso 2009 /2010 ha sido rechazada por las siguientes razones:
En nuestro proyecto no se especifica la innovación didáctica a incluir en las prácticas docentes, ni las actuaciones concretas para la consecución de objetivos; no hay temporalización en las actuaciones (¿existe esa palabra?) y carece tanto de indicadores que permitan una valoración de las actuaciones, como del compromiso personal del profesorado participante.
No tenemos otra opción que reconocer nuestra responsabilidad: sin duda alguna no hemos rellenado los papeles como había que hacerlo y, después de tres años de trabajo, deberíamos haber considerado que esos formularios sean, probablemente, el único elemento de juicio con que el CEP habrá podido contar para valorar nuestro proyecto. Tampoco es momento para quejas: el rechazo inicial del nuestro y de otros grupos de trabajo, sin duda permitirá a los asesores del CEP concentrar aún más su atención en los grupos aprobados y a nosotros, dedicar ese tiempo empleado hasta ahora en alguna que otra reunión por compromiso, y en la elaboración de formularios y memorias, a aquello que a nosotros realmente nos importa: la tecnología educativa.
En nuestro proyecto no se especifica la innovación didáctica a incluir en las prácticas docentes, ni las actuaciones concretas para la consecución de objetivos; no hay temporalización en las actuaciones (¿existe esa palabra?) y carece tanto de indicadores que permitan una valoración de las actuaciones, como del compromiso personal del profesorado participante.
No tenemos otra opción que reconocer nuestra responsabilidad: sin duda alguna no hemos rellenado los papeles como había que hacerlo y, después de tres años de trabajo, deberíamos haber considerado que esos formularios sean, probablemente, el único elemento de juicio con que el CEP habrá podido contar para valorar nuestro proyecto. Tampoco es momento para quejas: el rechazo inicial del nuestro y de otros grupos de trabajo, sin duda permitirá a los asesores del CEP concentrar aún más su atención en los grupos aprobados y a nosotros, dedicar ese tiempo empleado hasta ahora en alguna que otra reunión por compromiso, y en la elaboración de formularios y memorias, a aquello que a nosotros realmente nos importa: la tecnología educativa.
1 comentario:
Es cierto, no hemos rellenado bien los papeles. Pero que estén tranquilos nuestros seguidores: seguiremos funcionando SIN PAPELES. Porque gracias a lo que aquí se publica muchos profesores descubren herramientas que luego usan en la práctica docente con sus alumnos, que no tienen culpa de nada.
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